Estas técnicas de Meditación Vital se basan en el estudio de las reacciones defensivas de nuestros sistemas vitales durante el stress y las leyes biológicas naturales. Permitiéndonos superar con éxito sus aspectos más desagradables en nuestra vida diaria.
La Meditación Vital no depende de ninguna religión, filosofía o convicción política concreta, ni tampoco las contradice.
La Meditación Vital se vale de la percepción pura como medio para asegurar los beneficios que se propone obtener, ofreciendo guías para un comportamiento fisiológicamente justificable en pos de la felicidad y de la seguridad.
La Meditación produce un estado mental sano y descansado y estimula además la consciencia transformadora evitando los nocivos efectos colaterales del stress.
Hay especialmente algunas técnicas de Meditación Vital incomparablemente útiles para reducir el stress y desplegar cabalmente las posibilidades de energía, inteligencia y sa-tisfacción de una persona. La meditación ha permitido a los hombres de ciencia identificar una reacción natural del cuerpo que proporciona estabilidad e integración al sistema nervioso. Cuando se la moviliza adecuadamente, mediante la práctica correcta de la MV, esta reacción es tan automática como un reflejo. La MV permite que una persona alcance un profundo estado de descanso que repara los daños provocados por el exceso de stress y promueve un mejoramiento de la salud, la estabilidad emocional y el desempeño. Es posible que su mayor importancia se derive de la variedad de influencias que ejerce. La práctica regular de la técnica mejora la capacidad de aprendizaje, el desempeño motor perceptual y el tiempo de reacción.
Investigaciones actuales indican que la práctica regular de la Meditación aumenta la productividad y la satisfacción en el trabajo y reduce la elevada presión sanguínea, mejora las afecciones asmáticas y es útil en el tratamiento de las enfermedades mentales.
La reacción que provoca la MV es intrínseca al sistema nervioso humano. El crecimiento resultante de la práctica de la MV es un proceso absolutamente natural. Es una técnica que no implica esfuerzo alguno para alterar estados corporales o mentales ni para analizar o controlar la mente. De hecho, es algo tan natural y espontáneo como despertarse y sus efectos fisiológicos resultan del profundo descanso que se logra durante su práctica. Los efectos psicológicos correspondientes resultan de una integración espontánea de la actividad del sistema nervioso. Debido a su completa naturalidad y total espontaneidad, la MV difiere totalmente de cualquier técnica de hipnosis o sugestión. Por la misma razón, es algo totalmente aparente de las actitudes religiosas del individuo.
La reacción desencadenada por mediación de la MV es tan antigua como la humanidad. De hecho, la práctica correcta de la MV no depende de orientación cultural alguna, sino solamente de las capacidades inherentes al sistema nervioso. Además, el peculiar estado de descanso que se alcanza mediante la MV es tan natural y valioso para el desarrollo y el bienestar personal que en las más diversas tradiciones culturales aparecen referencias de él. Al proponer una técnica natural en lugar de una técnica artificial para fortalecer fisiológicamente a la gente y por ende desplegar sus capacidades innatas, nos sumamos a las filas de los movimientos que en todas las ciencias trabajan con el potencial humano.
En resumen, tenemos la certeza de que la Meditación Vital obtendrá un éxito inmediato y ofrecerá al público en general una eficaz explicación acerca de la forma en que la percepción pura y la inteligencia creativa, combinadas con un trabajo de respiración consciente, actividad corporal adecua, alimentación saludable y actitud mental y emocional positivas, podrán ayudar a la humanidad a hacer frente a "la crisis de la vida cotidiana".
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